Cuando todos esperaban el anuncio de la anulación de los indultos "para la popular", el presidente Nestor Kirchner sorprendió a la tribuna con un gesto acorde con el régimen constitucional al anunciar que no va a dictar un decreto para anular los indultos concedidos por el ex presidente Carlos Menem a los jefes militares que habían sido condenados por delitos contra la humanidad por los tribunales comunes.
Dijo el presidente:
"Sigo anhelando que la verdad y la justicia predominen, pero aspiro lograrlo respetando el marco institucional que la República impone. (...) En pos de la verdad y la justicia, tal vez sea la hora de desarticular la red de impunidad tejida a través de aquellos indultos. Algunos tribunales han declarado ya en casos concretos su inconstitucionalidad, pero esta vez, también respetando el marco institucional que la República impone, debe seguir siendo la Justicia quien deba dejar con claridad la inconstitucionalidad de dichas normas que, a mi juicio, chocan frontalmente con la ética republicana que recomienda que ante el crimen busquemos la verdad y anhelemos la justicia. No es posible reestablecer la calidad institucional y la marcha hacia la verdad buscando el atajo de lo inconstitucional. Nadie puede pedir que un decreto derogue a otro a través del cual se indultó. Aquellos indultos trasgredieron, a mi juicio y a mi verdad relativa, la ley fundamental de la Patria. Espero, como se reclama permanentemente, que prontamente la Justicia determine la validez de esa constitucionalidad o lo que yo pienso a mi juicio, la inconstitucionalidad de los mismos".
La decisión del primer mandatario de respetar la Constitución, es --obviamente- su obligación como funcionario de la República. Pero debe destacarse el hecho de que si hubiera decidido dictar los decretos de anulación, mañana la medida sería tapa de todos los diarios, mientras que la cuesión constitucional referida a la pertinencia del camino elegido hubiera sido relegada a un espacio menor en el interior de los mismos.
Este "ejercicio" de "auto contención" es una buena señal, entre tantos actos que omitieron considerar la vigencia del texto constitucional.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario