lunes, junio 30, 2008

Las Dos Caras del Estado

Hoy, el profesor de leyes de la Universidad de Yale, Owen Fiss, expuso ante un concurridísimo auditorio de la Universidad de Palermo, institución que le otorgó el doctorado honoris causa. Fiss expuso con una claridad envidiable algunas de sus ideas respecto de la libertad de expresión. A continuación, algunos apuntes.

Comenzó por exponer la idea de que la democracia es el sistema que se sostiene sobre la voluntad individual de los ciudadanos, concepción que me gustó por ser más específica y real que la efímera y harto discutible noción de pueblo. Fiss destacó que el sistema se basa en la idea de que la opinión de todos los ciudadanos merece ser respetada, para lo cual la educación ocupa un rol fundamental. Pero Fiss sostiene que la educación formal no es suficiente para la democracia, ya que ésta exige 'continuidad del proceso educativo'.

Y es por ello que existe un ongoing and informal system of education, que se expresa fundamentalmente a través de los medios masivos de comunicación, que son canalizadores del debate público. Se ocupó de distinguir estos medios masivos de los que llamó computer based means of communication, es decir, la Internet. Fiss consideró que la red no debe ser sobreestimada, y señaló algunos problemas específicos, entre ellos a) la brecha digital; b) la pasividad natural de los ciudadanos y c) el hecho de que éstos sólo se conectan con los que tienen afinidad. Esto me hizo acordar a lo que decíamos aquí, aquí y aquí respecto de los cubos de información que generan las nuevas tecnologías.

Por el contrario, para Fiss los medios masivos generan entendimientos compartidos respecto de asuntos de interés público, por lo que cumplen un rol fundamental en la educación no formal de los ciudadanos. Destacó las amenazas que sufren los medios masivos de parte del Estado (censura directa e indirecta) y se refirió específicamente a lo que llamó managerial censorship, es decir, la censura (¿o autocensura?) que resulta de presiones de anunciantes privados.

Consideró que sobre el mercado se pueden aceptar dos cosas: por un lado, es un efectivo mecanismo de alocación de recursos. Por el otro, tiene efectos restrictivos de los fines que la prensa debe cumplir en una sociedad democrática. En resguardo de esa función, están los códigos profesionales y las normas éticas, pero Fiss se mostró escéptico respecto del poder de estas iniciativas para proteger a los medios y periodistas de esta clase de presiones.

Y consideró que debe intervenir el Estado, convirtiendo a este tradicional enemigo de la libertad de expresión en un inesperado pero necesario aliado contra las fuerzas del mercado. De ahí la famosa ironía de la libertad de expresión.

El problema, claro está, son las formas y los mecanismos de esa intervención, que conlleva siempre el riesgo de que bajo el argumento de proteger el debate público el Estado en realidad silencie voces opositoras.

En esa complicada tarea, Fiss destacó el rol del Poder Judicial en juzgar si la intervención del Estado mejora el debate público y la participación de los ciudadanos en el proceso de autodeterminación colectiva. Recordó (creo que sin nombrarlo) el estándar de strict scrutiny y consideró que la medida de intervención del Estado debe de todas formas adecuarse al fin buscado y estar construida de una forma no necesariamente sobreabarcadora. De todas formas, guardó ciertos reparos sobre esta "falible" institución. Pero destacó que su relativa independencia respecto de la política y su compromiso con la "razón pública" dan ciertas garantías respecto de la imparcialidad de esa intervención.

Esos fueron algunos apuntes, volcados de corrido a esta bitácora. La sesión de preguntas y respuestas estuvo muy interesante. Si hay tiempo, en estos días publico algo sobre el tema.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

interesante tu blog.
Leì un poco nomás y simplemente comento para señalar que me resulto ¿extraño?/¿contradictorio?/¿intersante? que exista este post y un par de post más abajo una crítica tan ironica y dura a lo que esta sucediendo en la Plaza de los dos Congresos.

Quizás soy puro optimismo por estos diás pero tengo la impresión de que se imparte algo de la "informal education" a partir de un "debate amplio, robusto y deshinibido". Es más, a veces llego a pensar que hay más democracia en la plaza por estos diás de lo que hubo en las urnas en octubre.

saludos.

J.

Anónimo dijo...

Es un buen punto el que señalás Juan. Yo tengo una opinión bastante similar a la tuya respecto de lo que pasa en la Plaza de Congreso, y de hecho el post de abajo no busca ser irónico, ni pretende ocultar una crítica. Es sólo que me causó gracia que el conflicto, que en un momento se expresó en términos tan duros, haya derivado de golpe los tan infantiles como simpáticos muñecos inflables del Toro Alfredito, la Pinguinta y los huevos que bailan. Me causó gracia, eso es todo. Pero ciertamente, me parecen una buena expresión de democracia (de una joven democracia al menos) que encima demostró que es posible convivir todos juntos en armontía (y hasta jugar una tocata) entre todos. Comparto (algo) de tu optimismo. El tiempo dirá.

Anónimo dijo...

Thanks for the detail
I really appreciate your work

Anónimo dijo...

Muy buena la información del Doctorado Honoris Causa a Owen Fiss y su opinión sobre la red y la Internet como nuevos creadores de opinión... aunque muchas veces nos convertimos por ejemplo con los blogs en recicladores de recicladores... es decir no creamos la noticia... si no que la analizamos este rol hace parte de la noción de sociedad civil deliberativa a la manera de Habermas y otros como nueva definición de democracia... Ojo sin embargo, con la democracia directa, que a pesar de los pesares, y así sea educada y reeducada, puede ser manipulada por medios e imágenes... Caso colombiano con Uribe quien tiene altísimos rankings en donde le han ayudado los medios... Cómo eludir la información y la saturación de la información para cumplir el próposito no de la sociedad solo de la información sino del conocimiento? Por un lado como dice Fiss con más educación...pero queda el no fiarse de todo, el mirar algunas cifras, a pesar de que también se pueden falsear o determinar y en últimas en consolidar grupos, asociaciones, partidos, sociedad civil organizada para seguir deliberando...

Gonzalo