Hace cinco años veíamos en vivo y en directo cómo el mundo cambiaba en una soleada mañana de septiembre. Fue un martes. Un día feriado, un día cualquiera.
"Yo estaba en la facultad, ¿vos?".
Es una pregunta que siempre hago a la gente.
Es que para nuestra generación los atentados del 11 de septiembre fueron el equivalente malvadado de lo que la llegada a la Luna significó para la generación de nuestros padres. El mundo es cada vez más chico y casi que siento en la cara el polvo de los edificios más altos de Nueva York cayendo como si estuvieran hechos de harina.
Y no es polvo lunar: es polvo de escombros y de muerte.
Si lo vivimos con los ojos clavados en una pantalla, así también es mejor recordarlo: a través de la transmisión en vivo de las diferentes cadenas de televisión de ese momento.
El comienzo fueron puras especulaciones. ¿Fue una avioneta? ¿Una explosión desde adentro?
Sólo el segundo avión al que todos estaban mirando en vivo pudo despejar las dudas.
En la ABC (minuto 2.45) se ve clarito el momento del impacto. "Oh my God!", grita el cronista que estaba por teléfono. Y el locutor en estudios dice: "Parece un segundo avión, sí, es una segunda explosión". "Parece que es una especie de acción concertada para atacar el WTC", agrega. ¿Te parece?
En la CBS (minuto 2.50) la cronista reacciona con asombro. "Otro avión golpeó el medio del edificio. Oh my God, right in the middle!". "Definitivamente parece a propósito". "¿Por qué te parece que fue a propósito?" fue la estúpida pregunta del periodista de estudio. "Y porque...".
En la FOX (minuto 2.50) Oh, my goodness, there's another one! "Tenemos un ataque terrorista de proporciones que no podemos ni comenzar a imaginarnos ahora", dice brillantemente el anchorman de la cadena que más apoyó a Bush durante la famosa "Guerra contra el Terrorismo".
Con el correr de los minutos, las torres serían pasado. Hoy vemos más escombros y más muerte en el mundo, todo como consecuencia de ese día en el que EE.UU fue a dormir con sed de venganza. "Se temen terribles represalias", decía la edición especial vespertina de de Clarín de ese día.
Resultó ser una predicción terriblemente precisa.
"Yo estaba en la facultad, ¿vos?".
Es una pregunta que siempre hago a la gente.
Es que para nuestra generación los atentados del 11 de septiembre fueron el equivalente malvadado de lo que la llegada a la Luna significó para la generación de nuestros padres. El mundo es cada vez más chico y casi que siento en la cara el polvo de los edificios más altos de Nueva York cayendo como si estuvieran hechos de harina.
Y no es polvo lunar: es polvo de escombros y de muerte.
Si lo vivimos con los ojos clavados en una pantalla, así también es mejor recordarlo: a través de la transmisión en vivo de las diferentes cadenas de televisión de ese momento.
El comienzo fueron puras especulaciones. ¿Fue una avioneta? ¿Una explosión desde adentro?
Sólo el segundo avión al que todos estaban mirando en vivo pudo despejar las dudas.
En la ABC (minuto 2.45) se ve clarito el momento del impacto. "Oh my God!", grita el cronista que estaba por teléfono. Y el locutor en estudios dice: "Parece un segundo avión, sí, es una segunda explosión". "Parece que es una especie de acción concertada para atacar el WTC", agrega. ¿Te parece?
En la CBS (minuto 2.50) la cronista reacciona con asombro. "Otro avión golpeó el medio del edificio. Oh my God, right in the middle!". "Definitivamente parece a propósito". "¿Por qué te parece que fue a propósito?" fue la estúpida pregunta del periodista de estudio. "Y porque...".
En la FOX (minuto 2.50) Oh, my goodness, there's another one! "Tenemos un ataque terrorista de proporciones que no podemos ni comenzar a imaginarnos ahora", dice brillantemente el anchorman de la cadena que más apoyó a Bush durante la famosa "Guerra contra el Terrorismo".
Con el correr de los minutos, las torres serían pasado. Hoy vemos más escombros y más muerte en el mundo, todo como consecuencia de ese día en el que EE.UU fue a dormir con sed de venganza. "Se temen terribles represalias", decía la edición especial vespertina de de Clarín de ese día.
Resultó ser una predicción terriblemente precisa.
2 comentarios:
Tu blog es magnífico.
Respecto a esta entrada, lo único que aventuradamente puedo decir es que, como bien asegurás todos padecimos ese polvo trágico de las torres abatidas por la miseria de la humanidad.
Y participamos del desconsuelo de tantas familias afectadas.
Vimos materializar en nubes negras, desconcierto, gritos y angustiosos lamentos las hostilidades que, constantemente, nos acechan.
Fraseologías brillantes, de pensadores brillantes no alcanzan para lograr entender la locura de éste mundo que nos ha tocado.
Esperemos que la paz, no siga de licencia.
Saludos.
Ese día, (respondiendo a esa pregunta que hacés), estaba estudiando para un parcial.
¡Gracias Florencia! Eso, esperemos que la paz no siga de licencia. Saludos.
Yo me acuerdo que entró el profesor a clase, musitó algo sobre un avión contra las torres gemelas y dijo que ese día no iba a haber clase. Fue una de esas cosas que no se olvidan más, como la noche del 19DIC de ese año, acpa en BS.As. Saludos.
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